Costa Azul: nuestros pueblos preferidos cerca de Niza

De Èze al precioso pueblo de Saint-Paul de Vence, de los tesoros elevados en el interior nicense a las joyas ocultas de la Costa Azul, descubra algunos de los pueblos con un patrimonio único situados cerca de Niza.
Costa Azul: nuestros pueblos preferidos cerca de Niza
©Kirk Fisher/GettyImages

Èze, el pueblo más bonito de las Cornisas de la Riviera

Este pueblo, al que se llega por la Media Cornisa – una de las tres carreteras panorámicas que recorren, a lo largo de 30 kilómetros, la costa entre Niza y Mónaco – es absolutamente fotogénico. Dominando el mar, sobre un saliente rocoso nos espera una estampa de una belleza singular, formada por un laberinto de callejuelas salpicadas de escaleras y preciosas casitas. Suba hasta la terraza del Jardín exótico de Èze para disfrutar de unas vistas privilegiadas al mar. Si está despejado, incluso podrá ver Córcega. ¡Absolutamente espectacular!

Peillon, un encantador pueblecito situado sobre Niza

En el traspaís nizardo, a 30 minutos en coche de Niza, Peillon se eleva sobre un pico vertiginoso a lo largo de una preciosa carretera sinuosa. Este pueblecito de los Alpes-Marítimos presenta numerosos encantos que le conquistarán. Su arquitectura medieval perfectamente conservada, sus casitas provenzales, su impresionante circo de fondo… En Peillon todo parece suspendido, fijado entre mar y montaña.

Sainte-Agnès, el balcón pintoresco de la Costa Azul

Situado a 800 metros de altitud a la altura de Menton, el pueblo de Sainte-Agnès alberga uno de los patrimonios arquitectónicos más destacados de la Costa Azul. Quedará atrapado por su belleza al admirar sus hermosas casas centenarias agrupadas alrededor de la iglesia, las ruinas de su castillo medieval o su fuerte en desuso, último bastión de la Línea Maginot excavado bajo el pueblo. ¿Nuestro lugar preferido? El jardín medieval, que constituye un maravilloso mirador sobre el Mediterráneo y el parque nacional de Mercantour. Un festín para los ojos, ¡a solo 35 kilómetros de Niza!

Saint-Paul de Vence, la ciudad medieval de las artes y la cultura

Una escapada por Niza y sus alrededores significa pararse en este famoso pueblo de artistas. En el interior de sus murallas, Saint-Paul de Vence conserva el esplendor del pasado: aquí, hermosas casas blasonadas que albergan galerías de arte y talleres artesanales; más allá, una torre con matacanes y una iglesia de la Edad Media; un poco más lejos, una fuente del siglo XIX y su precioso lavadero abovedado. En lo alto del pueblo, la fundación Maeght, cuya magnífica colección rinde homenaje a artistas como Léger, Soulages o Kandinsky, es la meca del arte moderno de la Costa Azul. ¡Visita obligada!

Gourdon, un precioso pueblo de carácter aferrado a la roca

Aquí todo transmite belleza, encanto y autenticidad. En la ladera, dominando las Gargantas del Loup en Pays de Grasse, puede recorrer Gourdon como si fuera un museo al aire libre. Con su imponente castillo feudal, sus nobles casas de piedra que albergan talleres y tiendas de arte, sus callejuelas estrechas que florecen a la sombra de una iglesia del siglo XII, este antiguo enclave sarraceno le conquistará. Antes de volver a la carretera, deténgase en la plaza Victoria para disfrutar de una vista panorámica de toda la Riviera, desde la bahía de los Ángeles (en francés, baie des Anges) hasta el macizo del Estérel.