Evita que la alergia te mate al volante

Con la llegada del calor y la floración de todo tipo de plantas se incrementan en España los niveles de polen y las alergias. Una afección que provoca irritación en los ojos, sequedad en la garganta y, sobre todo, estornudos. Uno de los momentos que más peligro pueden suponer al volante, ya que hacerlo cuando circulamos a una velocidad de 90 km/h supone perder de vista la carretera en torno a 20 segundos. O dicho de otra forma recorrerás 500 metros sin control: este es el principal riesgo. De hecho, desde la Fundación Mapfre calculan que cada año cerca de un centenar de personas pierden la vida en la carretera por culpa de las alergias.

Situación preocupante

Las enfermedades alérgicas se han multiplicado por dos en la última década en España y, de hecho, ya afectan a cerca de 12 millones de personas. Y crecerá más en los próximos años ya que el Centro Europeo de la Fundación para la Investigación de las Alergias considera que en cuatro años la mitad de la población padecerá este tipo de dolencia.

En España las plantas que más problemas alérgicos producen son gramíneas, olivo, ciprés, salsola, plátano de sombra y parietaria, según explican desde el Comité de Aerobiología de la Sociedad Española de Alergología e Inmunología –SEAIC-.

Ocho trucos para no ponerte en peligro al volante, aunque sufras alergia…

1. Mantén el habitáculo limpio pasando cada mes un aspirador por el interior –sobre todo las alfombrillas, la tapicería de los asientos e, incluso, el salpicadero-. Evitarás la acumulación de suciedad, polvo, esporas y pólenes que puedan provocarte alergia en el interior.
2. Cada 15.000 kilómetros o, al menos, una vez al año cambia el filtro del habitáculo –desde 30 euros- que garantiza que no entren en él malos olores ni partículas que puedan causarte alergia. Marcas conocidas tienen filtros específicos para el habitáculo que ofrecen una protección mayor frente a los pólenes, con una eficiencia hasta un 92% más que los modelos tradicionales gracias al uso de materiales como el polifenol –sustancias químicas procedentes que plantas con propiedades antioxidantes- que garantiza la retención y neutralización de alérgenos.
3. Las horas del día con mayor concentración de pólenes son el amanecer y el atardecer, evita viajar en esos momentos. Recuerda que la Sociedad Española de Alergología ofrece una aplicación gratuita para móviles –polenes.com- que te informará de los niveles de polen en tu ciudad o en cada región que pases cuando viajes. A través de su web también encontrarás información detallada.
4. Es recomendable usar gafas de sol –con cristal polarizado que evita deslumbramientos-, tanto porque protegen nuestros ojos del contacto directo con el polen como porque reducen los inconvenientes de una excesiva luz.
5. No te auto mediques. Si sufres alergia lo más recomendable es acudir a un médico especializado para que analice tu caso y te recete la medicación más apropiada sin efectos secundarios. Recuerda que algunos fármacos utilizados para reducir los síntomas provocan somnolencia excesiva con el riesgo que supone al volante. DE hecho, expertos de la Sociedad Española de Alergología e Inmunología –SEAIC- destacan que tomar medicamentos que causan sueño supone un riesgo similar a conducir con una tasa de alcohol en sangre de entre 0,5 y 0,6 gr/litro. En la revista Tráfico de la DGT encontrarás una lista detalladas de los medicamentos que jamás debes tomar por los efectos secundarios que tienen al volante.
6. Durante los meses de primavera, cuando más se intensifican los síntomas, evita llevar animales en el coche –como perros o gatos-, ya que su pelo puede transportar partículas que te hagan estornudar con frecuencia mientras conduces.
7. Ojo a los ambientadores que utilizas. Algunos tienen sustancias como Limonene o Terpinene que pueden causar alergia.
8. Atento al aire acondicionado. Cuando lo utilices y pases por zonas con elevados niveles de polen activa la ‘recirculación del aire’: evitará tomar aire del exterior garantizando su limpieza.