La opinión de la Guía Michelin
El tesoro del Parque Nacional Barra Honda es un entramado de cuevas subterráneas que se visitan, algunas de ellas, en cordada y en compañía de un guía. El griterío exterior (monos aulladores) contrasta con el silencio de las cuevas, un despliegue de magníficas concreciones pobladas por murciélagos. Emociones fuertes garantizadas.