Este hotel encalado se encuentra en mitad del hermoso campo andaluz y es el alojamiento ideal para una escapada rural relajante.
La Posada alberga una piscina, abierta de junio a septiembre.
Los alrededores de la encantadora Posada de José Mª El Tempranillo son perfectos para pasear y admirar la arquitectura típica andaluza. Los huéspedes podrán relajarse en la terraza y disfrutar de la lectura bajo el sol.
Por la noche, se puede cenar en el restaurante del hotel, que sirve cocina local tradicional. También hay un bar que ofrece bebidas.