La opinión de la Guía Michelin
El rey Gustavo Vasa mandó construir este castillo en un lugar más elevado que la catedral para mostrar su poder y su ruptura con el cristianismo. Sus hijos lo transformaron en una residencia digna de la realeza, que en la actualidad alberga diversas instituciones y empresas. El salón principal, Rikssalen, se usa para las celebraciones. El Museo de Arte, distribuido por tres plantas, organiza exposiciones de arte contemporáneo sueco e internacional. También pueden verse las ruinas de la fortaleza primitiva.