Los escasos vestigios de esta antigua guarnición contrastan con la vista de los inmensos rascacielos de Toronto al fondo. Situado en un enclave estratégico a orillas del lago, el fuerte York fue el primer centinela del puerto de Toronto. Se construyó en 1793 y fue fortificado 18 años después, cuando las relaciones anglo-americanas empezaron a degradarse. Muy dañado tras el asalto estadounidense de 1813, los británicos lo reconstruyeron pero su importancia militar decreció al tiempo que lo hacía la amenaza estadounidense. A partir de 1841 se levantó un nuevo fuerte más al oeste. Renovado con motivo del centenario de Toronto en 1934, el fuerte se ha convertido en una popular atracción turística. Los guías caracterizados realizan exhibiciones y, en verano, maniobras militares. Tanto el Día de Canadá como el Día de Simcoe (1 de agosto) los niños gozarán al son de pífanos, tambores, mosquetazos y cañonazos.