La familia del arquitecto de la pirámide del Louvre, I. M. Pei, es originaria de Suzhou. Pei proyectó para este museo una estructura sobria y luminosa que se inspira tanto en las viviendas locales como en las líneas zen de los jardines de la ciudad. Un armazón radioso que sirve de marco a unas colecciones de fama internacional: reliquias del reinado de los Wu, joyas de jade, tejidos étnicos, cerámicas y objetos inclasificables como la pagoda en miniatura realizada con perlas de oro y jade. También contiene algunas de las mejores obras del pintor contemporáneo Zao Wou-ki.