La opinión de la Guía Michelin
Esta antigua fortaleza fue transformándose paulatinamente hasta convertirse, en el s. XVII, en un palacio renacentista. En 1893, el palacio fue pasto de las llamas y su reconstrucción duró hasta 1902. La visita rememora la historia del palacio, así como la de la casa de Hohenzollern, hoy dueña del lugar.