A principios del s. XX, este edificio de oficinas de 14 plantas (1903, Willis Polk) era el centro de la actividad comercial de San Francisco. Las señales de su azotea avisaban del paso de los navíos bajo el Golden Gate. Dañado por el incendio de 1906, no tardó en ser restaurado. La arquitecta Julia Morgan ejerció en la 10a planta la mayor parte de sus 46 años de carrera. Las columnas jónicas del porche dan acceso a un hall de ascensores con bóveda de cañón que comunica con el espacioso Grain Exchange Hall, cuyas columnas de mármol y capiteles dorados fueron testigos de no pocas transacciones. Las paredes están decoradas con 13 pinturas de William Coulter, especialista de las marinas, con imágenes de los majestuosos navíos que antaño surcaban la bahía de San Francisco.