La opinión de la Guía Michelin
Las ruinas de esta abadía fundada en el s. XII conmueven por su soledad y desamparo ante las crecidas del río. Todavía se perciben huellas del paso por aquí de las monjas que en el s. XIII adoptaron la regla del Císter. Observe, a la izquierda, la capilla de San Miguel (s. XV). Delante se levantan las ruinas de la iglesia abacial. La cabecera plana está dotada de elegantes ventanas y algunas secciones de las bóvedas del ábside aún permanecen intactas. A su derecha, la sala capitular es un buen exponente de arquitectura normanda del s. XIII.