La opinión de la Guía Michelin
La basílica de San Jorge es el más bello edificio románico de los que se mantienen en pie en el país. Consagrado a santa Ludmila en 925 y reconstruido con posterioridad a 1142, el templo, dotado de dos torres blancas, sigue la disposición habitual de las basílicas románicas: una nave alta y estrecha conduce hasta un presbiterio rematado por un ábside semicircular, precedidos aquí por una elegante escalera añadida en época barroca. La cripta, por debajo del presbiterio y compuesta por simples columnas con capiteles cúbicos, sobrecoge por su sobriedad.