La opinión de la Guía Michelin
Muy restaurada, la fortaleza es un laberinto de escaleras, plataformas y floridos jardines dispuestos en terrazas. El rey Federico Guillermo IV de Prusia se dedicó a acondicionar este castillo en ruinas a partir de 1842. Las diferentes estancias han sido amuebladas en estilo gótico y Biedermeier. Mina a cielo abierto en los alrededores.