La opinión de la Guía Michelin
Fundado por el santo durante su estancia en Milazzo (1464) pero remodelado después, el santuario está precedido por una hermosa escalera curvilínea y por una tribuna de bellas ventanas que engalanan su hermosa fachada,coronada por un alto caballete. En el interior, en la capilla de Jesús y María, destaca un curiosísimo altar de espejos, decorado con madera cincelada y dorada, presidido por una delicada Virgen con Niño de Domenico Gagini.