Dividido en dos grandes sectores -las cuestas y el llano-, el barrio de la Croix-Rousse se caracteriza por su ambiente pueblerino, en particular los días de mercado. Barrio de los tejedores (canuts) desde que Joseph-Marie Jacquard inventara su telar, se le conoce como la "colina que trabaja", con respecto a Fourvière, "la colina que reza". Sus pasajes (traboules) se adaptan perfectamente a la topografía del terreno, permitiendo así el transporte de las telas de seda sin que estas se mojen.