Este edificio románico, remodelado en el s. XIII, fue dotado de un presbiterio gótico en el s. XV y de campanarios barrocos en el s. XVII. Las nervaduras de las bóvedas están decoradas con claves esculpidas. Mención aparte merecen las vidrieras modernas, diseñadas en 1992 por H. G. Stockhausen.