Tradicionalmente, el barrio de Üsküdar (margen asiática) es uno de los lugares preferidos de los estambulíes, que vienen hasta aquí para tomar un té o un refresco en sus cafés junto al agua mientras contemplan las fantásticas vistas de Topkapi y Sultanahmet. Aunque el barrio haya dejado de ser el más musulmán de Estambul, sus mezquitas siguen siendo su principal atractivo.