El viaje hasta las Sorlingas nos reserva unas vistas espectaculares de sus islotes y afloramientos rocosos flotando en un maravilloso mar verde azulado. Este archipiélago azotado por los vientos está catalogado como sitio de una belleza natural excepcional; sus aguas constituyen un parque marino gestionado por un sindicato medioambiental en colaboración con el Ducado de Cornualles. Las islas Soringas albergan además en su territorio los vestigios de una cincuentena de dólmenes megalíticos de la Edad de Bronce.