Esta torre de vigía de 72 m de alto acabada en 1580 pertenece hoy día a la pequeña iglesia barroca de San Clemente (sv. Klimenta). Conocida como la "Torre Blanca" por el tono claro del gres empleado en su construcción, tiene la particularidad de poseer la tercera mayor campana del país. Su galería brinda una magnífica panorámica tanto del casco antiguo como de la ciudad moderna.