Situada en el espléndido macizo de la Boine, esta reserva reúne la fauna de los bosques de las Ardenas (ciervos, gamos, jabalíes) y, en un extenso claro, los animales que antaño poblaron la región: bisontes, osos pardos, cabras montesas, gamuzas, lobos, tarpanes (caballos de pequeña alzada), uros (una especie extinta que se ha podido recuperar mediante cruces) y caballos de Przewalski originarios de las estepas. La reserva se puede recorrer a pie, con la posibilidad de subirse a un trenecito (safari-car) cuando le parezca conveniente.