Ubicado en el exuberante valle de Waimea en la costa norte de Oahu, ofrece un ambiente relajado lejos del bullicio de las playas de Honolulu y Waikiki. Un lugar perfecto para conocer la cultura y la historia natural de Hawái. Puede recorrer por su cuenta un laberinto de senderos naturales, algunos de los cuales conducen a yacimientos arqueológicos.