La meseta de los "Mil Estanques", enmarcada por los valles del Ognon y el Breuchin, debe su nombre a la presencia de una multitud de charcas de origen glaciar. Aquí, los bosques, caminos y turberas conservan su magia, siendo escenario de numerosas leyendas. Salga de Faucogney-et-la-Mer para ir hasta el mirador de Saint-Martin (bonita panorámica del valle del Breuchin). Siga luego por la "ruta de los Estanques": disfrutará así de los parajes de una región aislada que puede llegar a recordar los paisajes finlandeses...