Este maravilloso palacio Neoclásico acabado en 1897 fue la primera biblioteca de la ciudad. Algunos de sus rasgos destacados son la suave fachada de piedra caliza, las ventanas retranqueadas y las elaboradas molduras Renacentistas de la entrada, cornisa y balcones. Entre para admirar su gran escalera de mármol que sube desde la entrada de la calle Washington hasta el Salón Preston Bradley, con su cúpula de vidrieras Tiffany. En el extremo norte del segundo piso hay otra magnífica cúpula con vidrieras. Todos los días hay un amplio programa con conciertos, películas, baile, conferencias y exposiciones de arte.