En el camino de Santiago de Compostela francés, la abadía de Cadouin esconde un claustro de los ss. XV y XVI magníficamente conservado. Fíjese en la belleza de sus proporciones y la gran diversidad de formas, en particular en las puertas flamígeras o renacentistas, las variadas claves de bóvedas, los plementos de las bóvedas y los capiteles historiados. La sala capitular alberga hoy el Museo del Sudario, donde se repasan ocho siglos de fervor religioso y peregrinaciones.