Los notables ejemplos arquitectónicos que se alinean a lo largo de la avenida más elegante de la capital -conocida también con el sobrenombre de "Campos Elíseos" de Budapest- se adornan de mosaicos, estatuas y frisos. Muy animada gracias a sus tiendas, teatros, museos (Liszt y Kodály) y a su ópera, Andrássy út se transforma en un elegante barrio residencial al llegar a la altura de Kodály körönd: empieza entonces una sucesión de edificios antiguos con fachadas decoradas de esculturas, bonitas villas y distinguidos palacetes.