La opinión de la Guía Michelin
Esta elegante iglesia domina desde sus dos campanarios gemelos la plaza Batthyány. En la portada pueden verse las figuras alegóricas de la Fe, la Esperanza y la Caridad, así como la imagen de Santa Ana con María. Como en todos los santuarios barrocos, el interior está profusamente decorado. Destacan: el altar mayor enmarcado por columnas de mármol, los frescos de la cúpula que representan la Trinidad, un púlpito dorado y adornado con angelotes, y el órgano.