A pesar de no ser tan alto como los otros tres grandes puertos (Aubisque, Tourmalet, Peyresourde) por los que pasa la carretera de los Pirineos, entre Eaux-Bonnes y Bagnères-de-Luchon, el puerto de Aspin ofrece unas preciosas vistas. La disposición de los macizos y el contraste de las cumbres nevadas con los bosques azulados son una verdadera maravilla. La bajada es muy regular y rápida: en 12,5 km, la carretera pasa de una altitud de 1.489 m a 704 m.