Esta plantación de 52,8 hectáreas está situada a 770 pies sobre el nivel del mar y ofrece vistas a los pitones, al mar Caribe y a la selva de Soufriere, declarados Patrimonio de la Humanidad. Todas las habitaciones tienen vistas espectaculares.
Habitaciones amplias y luminosas con balcón privado, ventilador de techo o aire acondicionado, WiFi, microondas, nevera, tostadora y hervidor de agua con té y café. Para mayor comodidad son lujosas camas king size, sábanas y almohadas.
Otras actividades de la naturaleza en las inmediaciones son buceo, snorkel, avistamiento de ballenas y delfines, avistamiento de aves (29 especies vistas en la propiedad), paseos a caballo y tirolesa. El establecimiento alberga 2 piscinas de agua dulce, una de borde infinito.