No se deje engañar por el aspecto colonial de la casa y confíe en el talento del chef, que ha pasado por muy buenas casas, para sorprenderle. Aquí podrá deleitarse con una cocina moderna, que resulta especialmente precisa cuando revisita los grandes clásicos (como es el caso, por ejemplo de ese sublime suflé de chocolate, del que se acordará durante mucho tiempo).
- Los inspectores de la Guía MICHELIN