En el centro del local, en una magnífica chimenea - asador se asa sobre las brasas una magnífica pieza de buey, mientras que los trofeos de caza de las paredes parecen mirarnos de soslayo. Lo que propone este asador a dos pasos del Limburghal es una auténtica inmersión en el universo country.
- Los inspectores de la Guía MICHELIN