A su inequívoco valor gastronómico hay que añadir un emplazamiento espectacular, pues se halla en un monasterio del s. XII rodeado de espacios naturales, bodegas y viñedos.El chef Marc Segarra, oriundo de Reus, propone a través de sus menús (Terruño, Terruño Versión Extendida y Legado) una experiencia culinaria de marcado tinte creativo, siempre con opción de maridaje para degustar sus fantásticos vinos y tomando como referencia tanto los productos de temporada de la propia finca como los que proceden de los pequeños productores locales. ¿Curiosidades? Las atenciones son extraordinarias, pues se ofrecen a aparcar el coche, agasajan con toallitas aromatizadas, invitan a una copa de champagne en "La Cueva" (colección privada de la bodega), enseñan el huerto... ¡Le tratarán a cuerpo de rey!