¿Se puede dar un paso más para conciliar cocina, enología y sustentabilidad? Aquí han demostrado que sí. La bodega Matias Riccitelli Wines, en Luján de Cuyo, ha construido el restaurante que completa la experiencia en unos contenedores, transformados y adaptados, que han "plantado" entre viejos viñedos. La propuesta del chef Juan Ventureyra, que se puede disfrutar tanto en el comedor como en la terraza bajo un ambiente informal, explora a través de sus menús (Mendoza y Argentina, ambos incluyen visita a la bodega) las raíces mendocinas acudiendo al producto de proximidad, en gran medida de su propia huerta pero buscando el carácter endémico. Aquí se vuelcan en el mundo vegetal, por eso los platos bailan en el alambre de un estilo vegetariano donde el concepto "de la tierra a la mesa" se vuelve superlativo (juegan con más de 90 variedades de tomates) y se enriquece con la audacia de añadir proteínas. ¡Nos han encantado los snacks y el plato Espinal (pato, coliflor, damasco y mostaza)!