La opinión de la Guía Michelin
Si deseas vivir una experiencia que te haga sentir como si estuvieras cenando en casa de alguien, éste es tu restaurante. Llamas al timbre y te conducen a una gran sala con capacidad para 16 comensales, todos sentados en mesas impresionantemente montadas y repletas de cristalería ornamentada. La cena empieza para todos a las 21.00 y dura unas tres horas. El chef-propietario, que entra regularmente en el comedor para hablar con sus invitados, ofrece un menú degustación de unos 17 platos. Sus influencias culinarias proceden en gran medida de Francia e Italia, pero también se puede esperar mucha presentación teatral y elaboradas construcciones. Bajo el espectáculo se esconden ingredientes de buena calidad, ya sea ternera con espárragos, trucha ahumada con almendras o vieiras con una deliciosa crema de limón. El servicio es formal, pero no carente de personalidad, y si no quieres tomar ningún tipo de decisión... ¡lo mejor es optar por el maridaje de vinos!