Producto local con conciencia ecológica, platos dedicados a los incendios, filosofía desperdicio cero, vajilla artesanal, promoción de pequeños productores cercanos… Esta es una casa de nueva generación, llevada por un equipo jovencísimo (la mayoría viene del Basque Culinary Center) que demuestra pasión y defiende una idea: "Cocinar el pasado desde el presente, pero con la mirada puesta en el futuro".El local, magníficamente ubicado frente a las murallas y a pocos metros de la monumental Puerta del Alcázar, está llevado por el abulense Carlos Casillas y busca sorprender, tanto con su íntimo interior de estética nórdica (solo hay tres mesas) como por la oferta gastronómica, centrada en un único menú degustación de tinte creativo (Alberche) con el que el chef quiere rendir un homenaje a sus orígenes, recuperando los sabores y los productos de su valle. ¡Completa bodega, con muchos vinos de la zona y la opción de dos interesantes maridajes (Raíz y Zarcillo)!