La opinión de la Guía Michelin
Con una anchura de 20 km, el golfo de Morbihan, un pequeño mar interior salpicado de islas e islotes (unos 60 en total), es una de las bahías más bonitas del mundo. Los amaneceres y atardeceres aquí son auténticos espectáculos. En el mar, las barcas de los pescadores y las gabarras ostrícolas se codean con las embarcaciones de recreo y los aficionados a los deportes náuticos. Ya en tierra firme, sus propios pies o la bici serán los aliados perfectos para descubrir los tesoros de las marismas o los numerosos dólmenes y cairns que nos transportan a un misterioso pasado. Un paisaje único que cuenta con el sello Parque natural regional.