El palacio de Champ-de-Bataille fue mandado construir en el s. XVII por Alexandre de Créqui, luego lo ocupó la familia de Harcourt hasta su saqueo en 1795. En el s. XX sirvió como campo de prisioneros de guerra y cárcel de mujeres. Hoy ha recobrado su antiguo esplendor. Magníficamente amueblado, sus salas albergan las ricas colecciones de mobiliario y piezas artísticas del propietario, el arquitecto de interiores Jacques Garcia. El jardín francés que rodea el palacio es una preciosidad.