Este cuartel entró a formar parte de la historia de la Revolución tras el asalto fallido del 26 de julio de 1953. Sin embargo, los impactos de bala que se aprecian en la fachada no son los originales. En el interior del bastión se ha instalado un colegio y el Museo Histórico del 26 de Julio. El museo, dedicado a los preparativos de la Revolución y a la lucha del M-26, recoge documentos, fotos y maquetas.