Esta casa de inspiración andaluza se caracteriza por sus líneas sobrias y su balcón con celosías. Se construyó en 1516 y sería la primera de las casas coloniales que se construyeron en la isla. En su interior alberga el Museo de Ambiente Histórico Cubano, que se hojea como si de una revista de decoración se tratase: una estupenda colección de mobiliario nos cuenta cómo nació un estilo típicamente cubano a partir de influencias de lo más variadas. Un marco excepcional y un contenido espléndido.