Una magnífica carretera de cornisa brinda vistas del golfo de Porto y el Capo Rosso. Bajando hacia el mar, la playa de arena fina aparece enmarcada por rocas rosas y maquis sobre un fondo de montañas. Cerca de la bonita playa de Arone, un monumento recuerda que fue aquí donde el 6 de febrero de 1943 el submarino Casabianca entregó las primeras armas a la Resistencia, permitiendo así el nacimiento de los maquis corsos.