La opinión de la Guía Michelin
Son muchas las huellas impresas entre 11000 y 7500 a.C. que decoran las paredes de la cueva de las Manos, pinturas rupestres cuyos colores conservan toda su viveza. El lugar, en la ladera de un cañón, debe ser visitado en compañía de un guía. En 1999, este testimonio único era declarado Patrimonio Mundial por la Unesco.