La opinión de la Guía Michelin
El bosque de Boulogne conserva todo su encanto de antaño: lagos, cascadas, estanques, prados impecables, sotobosques... Algunas carreteras para los coches, caminos arbolados para los caballos, recorridos para hacer senderismo, jardines: Boulogne es un paraíso para corredores, remeros, pescadores, ciclistas y, por supuesto, los niños, que disfrutarán de lo lindo en el Jardín de Aclimatación. Eso sí, por la noche es mejor evitarlo ya que el ambiente es bastante menos idílico.