Nada más entrar, nos topamos con una tienda tradicional (qammaq) junto a un gigantesco cráneo de ballena boreal. Las vitrinas están llenas de armas para cazar, herramientas de hierro y fotografías que ilustran la historia del estrecho de Cumberland y describen como de los primeros desplazamientos temporales de los inuits se llegó a la instalación definitiva de factorías comerciales de la Compañía de la Bahía de Hudson, como por ejemplo Pangnirtung. Se organizan visitas del Kekerten Territorial Historic Park, de una estación de pesca ballenera de finales del s. XIX, o también paseos en barco hasta la casa del guarda de Mt. Overlord (entrada del parque Auyuittuq). Desde el interior de la oficina de información podrá apreciar el magnífico fiordo de paredes verticales y aguas azules, que deja en un segundo plano a la playa, cuyas aguas heladas vienen y van en función de las mareas, que se encuentran entre las más altas del mundo.