La fortaleza de Akershus (hacia 1300) se alza frente al mar desafiando cualquier intento de invasión por esta vía. Transformada por Cristián IV en palacio renacentista a principios del s. XVII, hoy se utiliza para actos oficiales y alberga, en su parque, el Museo de la Resistencia Noruega durante la II Guerra Mundial. Disfrute desde las murallas de la bella panorámica del puerto, el fiordo y el ir y venir de los barcos.