La opinión de la Guía Michelin
La cuna del olimpismo ocupa un lugar aparte no solo en la historia de los santuarios griegos, sino también en la historia en general: éste ha sido el único que tras 2.700 años ha logrado perpetuar el espíritu que lo animaba. El estadio, apenas rastrillado, deja imaginar la emoción que despertaban las pruebas y las hazañas deportivas. El museo Arqueológico, en el que se expone la casi totalidad de lo hallado in situ, es uno de los más bellos de Grecia.