En este edificio neogeorgiano se hace un repaso a la historia de la ciudad. Además de interesante reproducciones de interiores (ss. XVII-XIX), incluidas dos estancias inspiradas en la casa de Rockefeller, pueden verse gran cantidad de objetos cotidianos o decorativos, y varias maquetas bastante instructivas. Por supuesto también se evocan la historia marítima y portuaria. Una planta entera está dedicada a los juguetes, con una impresionante colección de osos de peluche.