Un centro de recepción construido por el Wildlife Trust escocés se alza en la margen sur de la magnífica cuenca de Montrose, especie de laguna intacta y relativamente poco contaminada cuyas zonas pantanosas resultan de gran interés para la protección del medio ambiente y desempeñan un papel primordial en la migración de las aves. El lugar ideal para entender el comportamiento de las marismas y avistar la avifauna: más de 50 000 aves migratorias, entre ellas ánsares piquicortos, charranes árticos y garzas.