La opinión de la Guía Michelin
La sobriedad exterior de la iglesia del monasterio de las benedictinas, del s. XVI, contrasta con su interior, con espléndidos frescos de Bernardo Luini: pinturas de santos y escenas de la Pasión ocupan sus paredes de arriba abajo componiendo un increíble decorado. Un pasillo situado al fondo a la izquierda da acceso al presbiterio, donde se organizan conciertos.