La iglesia de Nuestra Señora fue construida entre los ss. XIII y XVI. Entrando a la izquierda se observa un Santo Entierro tallado en el s. XVII. De la misma época datan la restauración del presbiterio y, en la primera capilla a la derecha del mismo, el retablo con la imagen de san Benito orando y huyendo del demonio. En el flanco sur, el claustro renacentista se adorna con bonitos jardines de estilo francés declarados Jardin remarquable (de interés). Una galería de arte sacro expone objetos litúrgicos.