Conocido como Ta set Neferu («lugar de la perfección») durante el Egipto faraónico, este valle encajonado contiene más de sesenta tumbas de reinas, príncipes, princesas y algunos grandes dignatarios de la Corte. Inspirados en el Libro de los Muertos, los relieves, casi intactos, que decoran la Tumba de Nefertari (n° 66), primera esposa de Ramsés II, han conservado sus espléndidos colores originales. Admire, también, las tumbas de los hijos de Ramsés III, Amon-her-Khepechef (n° 55) y Khaemuaset (n° 44). La belleza de las tumbas suscitó la codicia de los ladrones. El Valle de las Reinas fue objeto, en la Antigüedad, de importantes saqueos que despojaron a las tumbas de sus momias.