La opinión de la Guía Michelin
El pequeño lago Iseo conquista por la variedad de sus agrestes paisajes recortándose sobre un fondo de altas montañas y por sus riberas, unas veces escarpadas y otras sinuosas, donde se acurrucan plácidos municipios. Es el caso por ejemplo de Pisogne, cuya iglesia de Santa María de las Nieves custodia frescos del s. XVI, y Lovere. Aquí, podrá instalarse cómodamente en una terraza a orillas del lago tras visitar su imponente basílica. En el centro de las aguas de un azul profundo se yergue la isla de Monte Isola (600 m de altitud).