Este sitio nacional histórico está formado por varios edificios restaurados de la Compañía de la Bahía de Hudson construidos entre 1884 y 1889. El cuartel y las zonas reservadas a los oficiales con su mobiliario fielmente restaurado están abiertos al público, al igual que la réplica de la delegación comercial. En las inmediaciones pueden verse la bodega para el pescado con salazones de pescado y carne de cerdo, y el almacén principal con una colección de pieles de enorme valor. Los guías, presentes por todo el recinto, están vestidos con trajes de época y tienen un montón de divertidas e instructivas anécdotas, también se encargan de realizar las tareas que solían llevar a cabo los ocupantes del fuerte en el s. XIX. En el centro de interpretación pueden verse exposiciones, artesanía y una pequeña película sobre la historia del fuerte.